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Limpieza del organismo
La función más importante y necesaria del agua es la de lavar y limpiar. Bien es sabido que el organismo está haciendo limpieza a cada momento, sobre todo cuando tenemos una alimentación demasiado abundante en proteínas, grasas, azúcares, panes y sal o condimentos. Para regular todo lo que muchas veces comemos el organismo necesita agua. Si no la encuentra, siente lo mismo que si nosotros queremos lavar los trastes pero sin agua. Tu lo sabes: deja los trastes sucios un día y verás como la comida se seca y pegostea, se vuelve más olorosa y se fermenta. Esto se agudiza, sobre todo, cuando hay calor. ¿Imagínate como estarán aquellos trastos si los dejas unos días? ¿un mes? … ¿un año? Ni pensarlo. Eso equivaldría a una especie de abandono a la cocina, sin decir todo lo que este abandono acarrea como olores desagradables, animalejos y demás. Sin embargo, y desgraciadamente, muchas veces hay organismos que sufren de esta escasez de agua, y no sólo por un año, ¡sino hasta por más! Es por eso que es hemos dedicado esta vez a hablarte de la importancia que tiene el agua en tu salud, bienestar y belleza, porque recuerda que la belleza es, sobre todo, limpieza y pureza, y si hay un buen aseo de tu organismo, esto sin duda se reflejará en tu semblante, en tus ojos y hasta en tus ¡emociones!.

La importancia de beber agua
Un ser humano, en condiciones sanas y normales, elimina aproximadamente dos litros de agua al día por medio del sudor y la orina. Obtenemos agua a partir de las frutas y verduras, más es el agua que bebemos  la principal forma de obtención de este líquido. Cuando no bebemos la suficiente agua, el organismo comienza a extraerla de los sistemas y órganos, y la piel, los ojos y las mucosas comienzan a sufrir principalmente las consecuencias de esta escasez: resequedad, enflaquecimiento, marchitamiento, endurecimiento de las toxinas en el cuerpo, orina demasiado concentrada y heces endurecidas. El empobrecimiento de humedad en el cuerpo provoca además que la sangre se espese y que pueda haber peligro de anemia, mala circulación, estreñimiento, problemas cardiacos y renales además de mal funcionamiento del sistema nervioso, etc. 

La forma correcta de beber el agua
Si, puede parecer una exageración, y pensarás que con que te tomes unos vasos de agua cuando te acuerdes es suficiente. Claro que esto es mejor que nada, sin embargo, estarás de acuerdo que no es lo mismo que haya agua en tu casa solamente a las dos de la tarde, y el resto del tiempo no haya agua ni para jalarle al inodoro. Pues con tu cuerpo sucede lo mismo. Así que es importante que…
• Bebas dos o tres litros de agua al día, pero no a la misma hora. Bébelos en porciones espaciadas durante el día. Lo ideal es beber un vaso o medio vaso cada media hora o cada hora, auque esto puede variar, sabemos, según tus actividades.
• Para que no se te dificulte el recordar beber agua, puedes comenzar a hacerte el hábito coordinándolo con tus actividades. Por ejemplo, si entras y sales mucho de tu casa puedes decir “cada vez que entre o salga de la casa beberé agua.” O “cada vez que pase al baño o me lave las manos o los dientes, beberé medio vaso de agua. O quizás te funcione algo así como “cada vez que haga un berrinche, o me preocupe por el dinero, o hable por teléfono, beberé agua”
• Es importante que bebas agua aunque no tengas sed. La sed del organismo indica que ya existe una escasez, y no hay que esperar hasta que ésta se manifieste.
• Aunque lo ideal es tomar agua a diferentes horas del día, hay una excepción: la hora de la comida. Procura beber agua una hora antes de comer y media hora después el agua. Cuando tomas cualquier tipo de líquido durante la comida, los jugos gástricos que ayudan a la digestión se puede llegar a diluir tanto con los líquidos que tu digestión se hará muy pesada y lenta.
•  Beber agua tibia o caliente es muy eficaz para la salud: no solo limpia el estómago y descongestiona los intestinos, disolviendo las mucosidades y toxinas y ayudándolas a expulsar, sino que es una purga mucho más eficaz y prácticamente regalada en comparación con otras muchas medicinas alópatas que se venden para remediar los problemas estomacales e intestinales. Cuando padezcas de indigestión, pesadez, nauseas, estreñimiento, hierve un vaso de agua, déjalo que se enfríe un poco y bébelo lo más caliente que puedas.
• Sin embargo, deja el agua caliente sólo para cuando te sientas mal estomacalmente. Prefiere el agua fresca si estás sano.
• Cuando pienses si tomaste la suficiente agua este día, no vayas a decirme que tomaste en cuenta los refrescos y bebidas que compraste en la tienda. ¡nunca es lo mismo el agua pura que las otras bebidas!
• Lo más difícil para comenzar a beber agua, cuando se tiene acostumbrado al paladar a los azúcares y sabores de refrescos y bebidas, es su ingrato sabor a “nada”. Sin embargo, estarás de acuerdo que no es lo mismo lavar los trastes con refresco que con agua pura. Esta diferencia puede sentirla de un modo muy similar tu organismo.
• Beber agua de manantial, es decir, mineral, tiene efectos realmente sanadores en el cuerpo.
• Y por último: cuando bebas agua, imagina que estás tomando un elixir, algo sanador y poderoso. ¿sabías que con tu pensamiento y tus manos puedes cargar el agua eléctricamente, ya sea positiva o negativamente? Esta interesante información la puedes encontrar ya en algunos libros que hablan de los cristales que forma el agua cuando simplemente la tocas con tus manos. Los cristales son bellísimos cuando la tocas con tus manos y agradeces o piensas en cosas placenteras. 
 
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